UNA GESTIÓN, DOS POSTURAS: LA CGT SE DIVIDE ANTE EL DIÁLOGO CON EL GOBIERNO

Este lunes, un sector de la Confederación General del Trabajo (CGT) se reunirá con el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, mientras que los gremios más combativos analizan medidas de fuerza. La Mesa Nacional del Transporte ya anunció un paro nacional de 24 horas para el 17 de octubre, marcando una clara diferencia entre las estrategias sindicales.

El encuentro con Francos tendrá lugar a las 17 en la Casa Rosada, y contará con la presencia de dos de los secretarios generales de la CGT, Héctor Daer y Carlos Acuña, junto a otros importantes referentes sindicales, como Andrés Rodríguez (UPCN), Gerardo Martínez (UOCRA), José Luis Lingeri (Obras Sanitarias) y Jorge Sola (Seguros). También estarán presentes dirigentes de sectores docentes, judiciales y gastronómicos.

Sin embargo, Pablo Moyano, el tercer miembro del triunvirato de la CGT, no participará de la reunión. Firme en su postura, Moyano expresó que “no tiene nada que hablar con el Gobierno”, criticando duramente la reforma laboral recientemente implementada por el Ejecutivo, uno de los temas clave que se debatirá en la reunión con Francos.

Agenda abierta, pero con un reclamo claro

Aunque desde la CGT y el Gobierno calificaron la reunión como de “agenda abierta”, los temas de fondo están claros. Gerardo Martínez, uno de los líderes más cercanos al Ejecutivo, destacó la importancia del diálogo tripartito. “Estamos abiertos a discutir para resolver los problemas del país, pero es necesario dialogar con quienes tienen poder de decisión. Si no lo hacemos con el Gobierno, ¿con quién lo vamos a hacer? ¿Con la oposición?”, señaló Martínez.

A pesar de su enfoque conciliador, Martínez también fue crítico de la reforma laboral, calificándola de “mala” y subrayando la necesidad de un acuerdo que no cargue todo el peso de las medidas económicas sobre los trabajadores. “Estamos obligados a encontrar un camino de diálogo, pero también podemos reaccionar como lo hacen los mercados o el campo. Nadie debe asustarse; cada sector tiene su derecho”, advirtió el dirigente.

Expectativas frente al modelo económico

Uno de los principales objetivos de la reunión es que Guillermo Francos explique cómo seguirá el modelo económico del Gobierno, en un contexto de despidos, suspensiones y caída de la actividad industrial y comercial. Según Martínez, la administración libertaria se enfoca demasiado en la baja de la inflación y el superávit fiscal, sin tener en cuenta el impacto en el sector más vulnerable.

“Necesitamos discutir cómo evitar que la recesión y el ajuste recaigan únicamente sobre el pueblo argentino. No estamos de acuerdo en cómo se están llevando a cabo estas medidas”, enfatizó Martínez, quien expresó la preocupación de la CGT ante las consecuencias sociales de las políticas actuales.

Desde la asunción de Javier Milei, esta será la tercera vez que la CGT se sienta a dialogar con el Gobierno. Las dos reuniones anteriores, tanto con Francos como con el secretario de Trabajo, Julio Cordero, terminaron sin acuerdos. ¿Será esta vez diferente? El tiempo dirá si el diálogo logra resultados o si las diferencias seguirán marcando la relación entre el Gobierno y la central obrera.