(Tomás Casanova) – Estamos en una época salvaje, o lo que podemos llamar la ira del salvajismo, un tiempo donde el dominador de la situación es el más malo, el más poderoso, el más grande de la manada.
Las guerras cambiaron presidentes y modelos políticos, económicos y sociales, pero inclusive en las guerras había reglas… códigos. Hoy, en cambio, hay salvajismo porque no hay amabilidad, no hay caballerosidad. ¿Antes había amabilidad en una guerra? Si. Los propios veteranos de las guerras son un ejemplo de esos códigos que se respetaban, sino, no estarían vivos para contar sus experiencias.
Hoy hay actos totalmente prohibidos, totalmente jugables y de hecho lo fueron ya que hay presidentes denunciados ante la Corte Internacional de la Haya, pero a quién le importa si es un organismo devaluado… desacreditado.
Es una época salvaje porque los presidentes actúan salvajemente, entonces sus subordinados actúan salvajemente; sus seguidores actúan salvajemente y nos obligan a los que no estamos con un bando ni con otro, a tomar precauciones ante el salvajismo, que puede ser manejado.
Nuestra primera defensa es siempre la creencia y la fe. Luego hay que tomar el lapso hasta que todo degeneren una gran hecatombe. Mientras tanto hay que tratar de relacionarse de modos muy humanos con la gente que tienen por tendencia ser agresivos en su modo de hablar. Ustedes tienen que tratar de cambiar, porque esta es una época donde todo el mundo se siente lastimado muy rápidamente.
El salvajismo es como una depilación sin cera, donde todos quedamos lastimados de una forma u otra a todos y nos afecta lo que ocurre, aunque no veamos noticieros, aunque se duele todo lo que pasa en el mundo.
Sabemos que esto va a tener un final. El tema es cómo hacer para evitar entrar dentro de la jaula de los salvajes; mantenerse afuera con salvaje menos salvajes, ese es el objetivo. No es momento de discusiones, es momento de dejar pasar; no es el momento de marcar límites.
Dejen que lo demás fluya, refúgiense en el dique y van a pasar muy bien este tiempo que no sabemos cuánto puede durar. No tenemos ni siquiera referencias, porque esta situación la vamos a encontrar desde Tailandia hasta Estados Unidos, de Argentina a Alemania, de China a Taiwán porque no queda nadie amable dirigiendo a personas amables.
Hoy solo hay violentos, más reclamadores de derechos o menos reclamadores de derechos pero no lo hay es la época salvaje tiene todo por eso se ven cosas cotidianamente impensadas impensables estamos muy bien estamos muy bien porque este es el tiempo que estamos anhelando porque sabemos que cada vez que se descompone más el medio está más cerca y el medio en Nuestro camino