LA UTA SE DECLARÓ EN ESTADO DE ALERTA POR “ABANDONO” POR PARTE DE LAS AUTORIDADES

A través de un comunicado informaron: “Los trabajadores del colectivo somos víctimas del sistema de subsidios, y es inhumano jugar con nuestra tranquilidad, sin saber si el cuarto día hábil vamos a cobrar nuestro salario”.

Los choferes de colectivos nucleados en la Unión Tranviarios Automotor (UTA) se declararon en “estado de incertidumbre y alerta” por lo que consideran un “abandono” por parte de las autoridades gubernamentales a los trabajadores.

“En línea con comunicaciones anteriores, una vez más, los trabajadores de la actividad de transporte colectivo de pasajeros estamos en estado de incertidumbre y alerta, ya que una vez más vemos el abandono por parte de las autoridades nacionales, provinciales y locales (desde el Presidente a gobernadores e intendentes), a los trabajadores a su suerte”, indicó la UTA en un comunicado.

“Los trabajadores del colectivo no inventamos el sistema de subsidios (fue el Estado), ni sus justas o arbitrarias distribuciones, beneficiando a algunos grupos concentrados y perjudicando a otros por montos millonarios. Lo decimos y reiteramos, los trabajadores del colectivo somos víctimas del sistema de subsidios, y es inhumano jugar con nuestra tranquilidad, sin saber si el cuarto día hábil vamos a cobrar nuestro salario porque tal o cual no transfirió una compensación, un subsidio, o como lo quieran denominar, o si no hay aumento de tarifas (en perjuicio de público usuario)”, señalaron desde el sindicato.

Remarcaron que “el salario es la contraprestación del trabajo, nosotros trabajamos, llueva, truene, feriados, y tenemos derecho a percibir nuestro salario, porque es la contraprestación por nuestro débito laboral, un salario bien ganado”.

Además, reclamaron que “arreglen sus cuentas” entre ellos, porque “los trabajadores tenemos que tener la certeza que el cuarto día hábil vamos a cobrar nuestros haberes, es un derecho, amparado por la ley”.

La UTA señaló que el sector está “cansado de ser las víctimas de un sistema perverso, poco transparente. Cuando los trabajadores agotan su paciencia, hacen trinar el escarmiento”.