En el seno de la Confederación General del Trabajo (CGT), existe un consenso sobre la insatisfacción con el rumbo del gobierno de Javier Milei, aunque hay divergencias sobre las acciones a seguir. Las críticas se centran en la necesidad de que el Partido Justicialista (PJ) se ordene y, preferiblemente, se renueve, junto con la unidad para enfrentar los desafíos del segundo semestre del año. Ante un ajuste libertario y un escenario cargado de conflictividad social, la CGT debe proporcionar respuestas a sus bases.
CRÍTICAS AL GOBIERNO DE JAVIER MILEI
Todos los sectores dentro de la CGT coinciden en que el rumbo económico elegido por el Presidente no solo es incorrecto, sino que también tiene un futuro incierto, tensionando la paciencia de una gran parte de la sociedad. Gerardo Martínez, secretario general de la UOCRA y una figura clave en la CGT, expresó claramente esta opinión recientemente.
“No hay mucho margen: si uno analiza encuestas de opinión en distintos sectores de la sociedad, el estado de ánimo empeora. No sé si el Gobierno toma nota de todo esto, pero indudablemente se puede generar una tormenta por la sociedad afectada”, advirtió Martínez.
LA POSICIÓN DEL ALA DURA DE LA CGT
Pablo Moyano, representante del ala más dura del sindicalismo, coincidió en sus comentarios, agregando que la Ley Bases, desde su perspectiva, generará conflictos sociales adicionales.
El secretario general de la CGT siente que la lucha contra la administración libertaria debe ser constante, visible y en las calles, ya que, según él, La Libertad Avanza no retrocederá. Sin embargo, su postura no es unánime dentro de la CGT, ya que algunos sectores prefieren esperar a que la sociedad acumule descontento y que el PJ comience a sentar las bases de su futuro.
Esta discusión se hizo evidente durante la movilización contra la Ley Bases, donde Andrés Rodríguez se opuso a las manifestaciones mientras que el sector moyanista impulsó una convocatoria.
PREOCUPACIÓN POR EL PARTIDO JUSTICIALISTA (PJ)
En cuanto al principal partido opositor, la preocupación es generalizada debido a la falta de avances significativos para construir una alternativa al oficialismo. Tanto Martínez como Moyano notaron esta problemática.
“Es hora de plantear nuevos liderazgos, hablar en ámbitos democráticos, habilitar las discusiones internas, tener en cuenta la visión de los gobernadores. Hoy el PJ no tiene una identidad definida y necesitamos volver a tenerla para representar a la sociedad, para comenzar a desarrollar políticas de Estado, con diálogo y consenso”, expresó Martínez.
Por su parte, Moyano criticó la falta de timing opositor del peronismo en relación con la Ley Bases.
MOYANO Y LOS “TRAIDORES”
“Lamentablemente, por la falta de conducción del peronismo, pasó lo que pasó en el Senado. No se pudo contener a dos senadores traidores como el de Corrientes (Carlos Espínola) y el de Entre Ríos (Edgardo Kueider). La tranquilidad que deben tener los trabajadores es que la CGT no se va a dividir y seguirá confrontando con este Gobierno”, afirmó Moyano.
UNIDAD EN LA CGT
A pesar de las diferencias sobre las tácticas a emplear, en la CGT creen que la unidad debe estar fuera de discusión. Si Milei encuentra a un gremialismo fragmentado, no habrá futuro para la dirigencia ni posibilidades de motorizar la resistencia, según el razonamiento prevalente.
“La resistencia de los trabajadores la está encabezando la CGT y no se va a partir ni dividir, y va a seguir confrontando las políticas de Milei”, advirtió Moyano.
ENCUENTRO CLAVE DE LA MESA CHICA DE LA CGT
En los próximos días, la mesa chica de la CGT se reunirá para que los distintos sectores – los “gordos”, los independientes y el moyanismo – intenten acercar posiciones y plantear un esquema para enfrentar el segundo semestre. Cada dirigente llevará propuestas basadas en un análisis de la coyuntura y se tomarán decisiones por consenso, como anticipó Martínez.
La CGT se encuentra en una encrucijada: unificar su posición y fortalecer su liderazgo para hacer frente a un gobierno que consideran errático y con pocas perspectivas de futuro, mientras buscan que el PJ se reorganice y renueve, preparando el terreno para futuras políticas de Estado basadas en el diálogo y el consenso.