LA SOMBRA DEL FMI Y EL FANTASMA DE LA FLEXIBILIZACIÓN: ARGENTINA AL BORDE DEL PRECIPICIO LABORAL

En una Argentina donde más del 60% de los hombres y el 70% de las mujeres jóvenes trabajan en condiciones informales, según datos recientes de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) , el país enfrenta una crisis estructural que amenaza con profundizarse ante las nuevas exigencias del Fondo Monetario Internacional (FMI).​

El reciente acuerdo técnico entre el gobierno de Javier Milei y el FMI, por un monto de 20.000 millones de dólares, incluye condiciones que apuntan a una flexibilización de las relaciones laborales. El organismo internacional ha solicitado avanzar en cambios que faciliten la negociación de condiciones laborales, lo que podría traducirse en una mayor precarización del empleo .​

Estas medidas se inscriben en una serie de reformas estructurales promovidas por el gobierno actual, que incluyen ajustes fiscales, reducción de subsidios y modificaciones en los sistemas jubilatorio y tributario . Sin embargo, la implementación de estas políticas neoliberales ha sido objeto de críticas por su potencial impacto negativo en los sectores más vulnerables de la sociedad.​

La OIT ha señalado que la informalidad laboral es un problema estructural en Argentina, afectando especialmente a los jóvenes y a las mujeres . La falta de acceso a empleos formales limita las oportunidades de desarrollo y perpetúa la desigualdad social.​

En este contexto, las exigencias del FMI podrían agravar la situación, al promover una mayor desregulación del mercado laboral. La flexibilización de las relaciones contractuales podría facilitar despidos sin indemnización y contratos sin estabilidad, profundizando la inseguridad laboral y la desigualdad.​

Es fundamental que las políticas económicas y laborales se orienten hacia la inclusión y la protección de los derechos de los trabajadores. La búsqueda de estabilidad macroeconómica no debe hacerse a costa de la precarización del empleo y el aumento de la informalidad.​

Argentina se encuentra en una encrucijada. Las decisiones que se tomen en los próximos meses serán determinantes para el futuro del país y de su población trabajadora.