En un contexto de creciente malestar social, los trabajadores de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) se hicieron presentes en la marcha del miércoles en defensa de los jubilados, quienes fueron reprimidos durante su manifestación frente al Congreso de la Nación. La Asociación del Personal de Organismos de Previsión Social (APOPS), gremio que agrupa a los trabajadores de la ANSES y es liderado por Leonardo Fabre, expresó su rechazo y repudio a la represión de los jubilados que protestaban por la decisión del presidente Javier Milei de vetar la ley que eleva las jubilaciones y modifica la fórmula de actualización de haberes de acuerdo con la inflación.
La represión llevada a cabo por la Policía Federal Argentina, bajo las órdenes de la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, incluyó el uso de gas pimienta y golpes contra los adultos mayores, lo que generó indignación y una fuerte condena por parte de diversos sectores sociales. La medida policial fue vista como una reacción desproporcionada ante una manifestación pacífica en la que los jubilados reclamaban no solo por un haber jubilatorio digno, sino también por el reciente retiro del descuento del 100% en medicamentos, una medida que afecta directamente a quienes más necesitan ese beneficio.
Ante esta situación, Leonardo Fabre, secretario general de APOPS, fue categórico al expresar su rechazo a la represión y cuestionar el accionar del gobierno. “Ignorantes, salvajes que no entienden que no solo necesitan medicamentos sino que además ya hay hambre en la mesa de los jubilados mientras este presidente veta un aumento del 8%”, sentenció Fabre, en un comunicado titulado “Milei reprime a los jubilados”.
En respuesta a estos acontecimientos, APOPS convocó de urgencia a una reunión de la Comisión Directiva Nacional para definir las medidas y acciones a tomar frente a lo que consideran una “nueva represión” contra los jubilados. Para Fabre, esta situación evidencia un alto grado de insensibilidad social por parte del gobierno actual, que “no tiene ningún tipo de reparo ni distinción a la hora de disciplinar y reprimir la protesta social.”
En declaraciones adicionales, Fabre sostuvo que “los jubilados son la razón de existir del organismo, y las actuales autoridades de la ANSES no están defendiendo a los jubilados, que no son ni números ni molestias para el Estado”. “Si los funcionarios no entienden esto, entonces el ANSES no merece llamarse ANSES”, afirmó contundente el dirigente gremial.
La postura de Fabre y de APOPS refleja el creciente descontento entre los trabajadores de la ANSES, que consideran que las políticas del gobierno actual están lejos de proteger a los jubilados y jubiladas, quienes enfrentan una situación de creciente precariedad económica y social. En este contexto, la lucha en defensa de los derechos de los jubilados parece haber encontrado nuevos aliados en el personal de la ANSES, que denuncia con firmeza lo que considera una grave injusticia.