“Cuando hicimos la medida de fuerza en los aeropuertos, el Gobierno habló de un paro salvaje. Este Gobierno no tiene ni idea de lo que es una huelga salvaje. Si cierra la Casa de Moneda, va a empezar a darse cuenta”, señaló Rodolfo Aguiar.
La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) realizó una manifestación en la Casa de Moneda ante el anuncio de cierre y la intención de despedir a todos sus trabajadores. “Cuando hicimos la medida de fuerza en los aeropuertos, el Gobierno habló de un paro salvaje. Este Gobierno no tiene ni idea de lo que es una huelga salvaje. Si cierra la Casa de Moneda, va a empezar a darse cuenta”, señaló Rodolfo Aguiar, Secretario General del sindicato.
“Los despidos y el cierre de organismos se traducen en la supresión de derechos fundamentales, derechos constitucionales que tiene todo el pueblo. Acá tenemos un Gobierno que a veto y decreto, en los hechos reforma la Constitución, y los delitos contra la Constitución están contemplados en el Código Penal. El artículo 226 establece penas de prisión para quienes cometan delitos contra la ley fundamental de la nación, y si lo hacen funcionarios públicos, incrementa un tercio el mínimo de la pena. Ya podemos anticipar el final de esto: los que están en la Casa Rosada terminan todos presos y si seguimos luchando vamos a lograr reincorporar a los despedidos, y va a ser en la planta permanente del Estado”, apuntó el dirigente desde la sede del organismo en Av. Antártida Argentina 2085 (CABA).
Aguiar aseguró que “quieren cerrar un organismo que cuenta con trabajadores altamente calificados y con la última tecnología” y concluyó: “Es incomprensible que no se impriman los billetes acá. Quieren hacer negocios con las multinacionales. Nunca más vigente aquella frase de Arturo Jauretche: ‘Si malo es el gringo que nos compra, peor es el criollo que nos vende’. Este Gobierno está lleno de criollos que nos quieren vender”.
La Casa de Moneda es un organismo dependiente del Ministerio de Economía que funciona ininterrumpidamente desde su creación en 1875 y cuenta con personal altamente capacitado en sus dos plantas: Retiro y Don Torcuato.
Son más de 1.500 los puestos de trabajo que corren peligro a partir de la decisión del Gobierno Nacional.