(Por Daniel Vico Abogado Político Escritor) – La victoria de Javier Milei en el Ballotage del año 2023, no fue ni más ni menos que el hartazgo de una sociedad dolida, desesperanzada, cansada y sufrida, que veía con buenos ojos que una persona outsider (por fuera) de la política tomara las riendas de un país cada vez más decadente, y ahí fueron, junto a los votos, la esperanza de distintos sectores postergados por los anteriores gobiernos.
Pero la alegría y la esperanza duraron poco, ya a los pocos meses de asumir la presidencia, Milei empezó una “guerra” contras periodista, políticos opositores y propios (Victoria Villaruel), simultáneamente comenzó una relación carnal con EEU, la que fue unilateral, ya que Trump, si bien lo recibió una primer vez, luego ya no lo recibiría más.
Los errores no forzados, propios y hasta incomprensibles de un tipo que, al no venir de la casta (la política, no sabía que había que gobernar para la gente y no para el superávit fiscal, no entendia que los números tenían que cerrar CON LA GENTE ADENTRO.
Así las cosas, envalentonados por una victoria en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, donde aplasto al PRO y dejo segundo al peronismo, prepoteo a los dirigentes del Pro Ritondo y Santilli, a los que cuasi obligo a un acuerdo en la provincia de Buenos Aires, que a todas luces se sabía que LLA no haría pie, pues las políticas económicas habían pegado en el corazón del conurbano.
Los desastres electorales de las provincias de Corrientes y Buenos Aires parecen no haber conmovido la estructura interna de la psicología de MIlei, mucho menos el rumbo económico.
Ahora resta esperar una nueva derrota en octubre para ver que repercusión causa en el ego de una persona narcisista que, desde el primer momento dijo que venía a destruir al Estado desde adentro.
Note el lector que el titulo menciona Parte 1, y como siempre se puede estar peor, luego del 26 de octubre podrá leer la Parte 2 de este experimento fallido y doloroso para el pueblo argentino.