Con fuerte respaldo del Estado y el sector privado, se busca trasladar el potencial gasífero del país hacia las estaciones de servicio, el transporte de cargas, el transporte público y los vehículos particulares.
CÓRDOBA.– En una jornada que muchos calificaron como “histórica”, se lanzó oficialmente este lunes 13 de octubre en el Ministerio de Infraestructura de Córdoba la Comunidad Nodo para el Desarrollo del GNC y el Biogás, una iniciativa impulsada por el diputado nacional Juan Fernando Brügge junto al gobierno provincial. Participaron los ministros Fabián López (Infraestructura) y Pedro Dellarossa (Producción), junto con empresarios, técnicos, fabricantes y representantes del ENARGAS, en lo que fue definido como el puntapié de la segunda revolución del GNC en Argentina.
La convocatoria, que reunió a toda la cadena de valor del gas natural comprimido, se centró en un objetivo: trasladar el potencial gasífero de Vaca Muerta al transporte, las estaciones de servicio y la movilidad urbana e interurbana. “Si no consumimos el gas de Vaca Muerta en los próximos diez años, perderemos todas las oportunidades”, advirtió Julio César Secondi, presidente de TAMSE, quien instó a “potenciar el compromiso de las empresas nacionales y del Estado” para avanzar en el transporte público a GNC.
Por su parte, Ignacio Armendáriz, director comercial de Agrale Argentina y CLAUTO, anunció que la compañía finalizará para 2026 la entrega de 200 unidades de buses a GNC. “Estamos convencidos de que el GNC será una ventaja tecnológica para el país, pero necesitamos inversión e infraestructura”, subrayó. Recordó que hoy existen unas 300 estaciones capaces de despachar GNC de alto caudal, pero “para abastecer colectivos urbanos se requiere una capacidad ocho veces mayor”. En esa línea, reveló que ya hay proyectos de surtidores especiales financiados por las propias distribuidoras, “pagando el gas a medida que se carga el colectivo”.
El encuentro mostró también avances industriales. Federico Baratella, presidente de la Cámara de Fabricantes de Equipos Completos de GNC, destacó que están implementando equipos de GNC desde origen, en conjunto con las terminales automotrices, para que los vehículos nuevos mantengan la garantía de fábrica. “Queremos replicar el éxito de los programas con Renault y Fiat para taxis y remises previos a la pandemia”, señaló.
Desde el sector energético, Ignacio Barousse sostuvo que el desarrollo del GNC puede generar hasta 3.000 millones de dólares en divisas en cinco años y “reducir el déficit energético, las emisiones y los costos logísticos”. Coincidieron en reclamar políticas públicas estables, incentivos fiscales y acompañamiento estatal. “Argentina es líder mundial en transporte liviano a GNC, pero las conversiones se amesetaron. Necesitamos que el gobierno nacional se ponga la camiseta del gas natural”, enfatizó Barousse.
Martín Lapenta, de AGIRA, llamó a “confiar en la tecnología nacional” y acelerar la carga de alto caudal para buses y camiones. A su turno, Juan Fracchia, de INFLEX, celebró el desarrollo de nuevos cilindros de fibra de carbono y fibra de vidrio “que modernizarán el transporte público”, mientras Juan Ojanguren, de Galileo, destacó que la tecnología argentina de GNC “ya es modelo en el mundo”, exportándose a más de 70 países.
En el panel automotriz, representantes de Scania, Iveco y Renault coincidieron en que el GNC ofrece ahorros del 15 al 30% frente al diésel, con reducción de ruido y emisiones históricamente bajas, y afirmaron su compromiso con la incorporación del biogás en la matriz de movilidad.
Desde el ámbito provincial, Rubén Borello, subsecretario de Infraestructura Gasífera, destacó que “Córdoba convirtió al gas en una política de Estado, triplicando los gasoductos y conectando 1.300 industrias y 300 estaciones de servicio”. Anticipó además créditos para nuevas inversiones en infraestructura gasífera.
La presidenta de la Cámara de Expendedores de Combustibles de Córdoba, Marisa Centenaro, valoró la reactivación del debate: “El sector estacionero siempre puso el pecho a las adversidades. Necesitamos que el GNC vuelva a estar en la agenda energética nacional”.
Finalmente, Juan Fernando Brügge agradeció el apoyo del gobernador Martín Llaryora y afirmó que “este es el primer paso hacia una verdadera transición energética federal”. “El GNC no solo es un combustible económico y seguro: es una oportunidad estratégica para el país”, cerró.
A 40 años de su primera expansión, el GNC encara así su segunda gran revolución, impulsado por la sinergia público-privada, el potencial de Vaca Muerta y la convicción de que el gas argentino puede —y debe— volver a mover al país.