La Secretaria general adjunta de ATE Nacional y trabajadora del SENASA, Mercedes Cabezas, manifestó su preocupación tras la designación de María Beatriz Giraudo como nueva titular del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA), y luego de las declaraciones del presidente de la Sociedad Rural Argentina, quien sostuvo que es necesario eliminar la “influencia clientelar político gremial”.
“El SENASA es un organismo de prestigio internacional que históricamente se sostiene gracias a las y los trabajadores que, con salarios bajos y en condiciones adversas, garantizan que nuestros productos lleguen a más de 180 países y que en nuestra propia mesa consumamos alimentos de calidad.
Lamentablemente, hacia adentro, existe un fuerte lobby de empresas que pretenden que el Estado compre sus productos —como vacunas, por ejemplo— o contrate a su personal, como veterinarios y técnicos”, advirtió Cabezas.
La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) repudió formalmente los dichos del presidente de la Sociedad Rural Argentina, quien afirmó que “hay que terminar con la ineptitud, la burocracia y la influencia clientelar político-gremial”, en una clara descalificación hacia el rol del Estado y sus trabajadores. Horas más tarde, el presidente del SENASA presentó su renuncia.
Actualmente, el SENASA cuenta con un área central y 14 Centros Regionales distribuidos en todo el país, además de numerosas oficinas locales que atienden las necesidades sanitarias y fitosanitarias de cada región.
“Estamos en estado de alerta y organizándonos, porque hay mucha preocupación dentro del organismo. Las y los trabajadores no tienen información sobre cómo será la nueva gestión, y eso genera una gran incertidumbre, especialmente en las provincias”, concluyó la dirigente.